Al socaire: La poesía es un alien y Gamoneda su profeta
Antonio Gamoneda, un hombre recio, pero sencillo de apariencia, amable en un cuerpo tosco, sutil entre sonrojos, genial con cuatro pinceladas de palabras, recibió, merecidamente, el Premio Cervantes.
Dicen algunos que no leen más que lo que no importa a nadie, que tuvo influencia el que sea leonés, es decir, de la misma tierra que el presidente R. Zapatero. Pero no. La verdad es que nació en Oviedo, como yo. Y ha dicho que la poesía no es literatura.
A Antonio Gamoneda
Estoy de acuerdo, paisano:
La poesía es un alien
que necesita de un portador para manifestarse.
No es, qué va, literatura, es un flujo,
una esencia que puede adivinarse
escondida entre frases sin sentido,
o mostrarse, espléndida, en toda su belleza¨
en inolvidables momentos de locura.
Ni siquiera necesita a los poetas,
cualquiera puede convocarla.
Basta estar atento al tiempo de su paso,
o captarla cuando huye,
dejar que nos envuelva,
con su perfume de ansias, preguntas
y afiladas caricias.
Por no necesitar, no necesita
ni formas de expresarse, es
intangible, invisible y etérea.
Somos nosotros quienes la forzamos
a quedarse a este lado,
expresando con nuestras voces
su corporeidad imposible;
torciendo su realidad, que es no existir,
la mancillamos, violentándola al cabo.
No la hacemos, poesía,
nos hace como somos,
poemas del azar, torpes ilusos
que no queremos escuchar a qué poetas.
23 de abril de 2007