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El blog de Angel Arias

Al socaire: Las manos de Antonio Gamoneda

Al socaire: Las manos de Antonio Gamoneda

Ayer acabé la tarde en el Paraninfo de la Universidad Vieja de Alcalá de Henares (qué difícil se ha puesto aparcar en esta vella ciudad). Con el realce de la asistencia de varias autoridades académicas y políticas, tuvo lugar un homenaje, al poeta Antonio Gamoneda, premiado recientemente con el Cervantes de las letras, y que se le entregará el próximo 23 de abril en el mismo marco. Por eso, el acto tuvo algo de ensayo previo.

El encuentro del poeta con la Academia alcalaína estuvo presidido por el rector, el ex-ministro Virgilio Zapatero ("¿Nos conocemos?" me preguntó, atento y algo hipermemoriado, ya que, aunque yo lo conocía a él por la tele, solo habíamos coincidido físicamente en un par de actos multitudinarios en los que andaba haciendo de público). 

Fue una velada simpático, entre amigos (sobre todo, profesores de la Universidad), en el transcurso de la cual Gamoneda recibió con su habitual campechanía los elogios de todos y, en especial, de dos de sus hagiógrafos, poetas ellos también, escuchó algunos trozos musicales al violín interpretados por una solista húngara que pasó algo de frío, y nos leyó una selección de su antología, con buen tono oral, aunque los que seguimos a este poeta de la muerte y la soledad, ya sabemos que quince minutos de su poesía, leída en voz alta y sin estar acompañada de un buen guisqui, puede dejar el tono vital por los suelos.

Las manos de Antonio Gamoneda, que he fotografiado desde arriba, están firmando la dedicatoria de un libro suyo, que está en mi poder desde los ochentaytantos, y que me regaló una amiga admiradora -de él, no mía-, después de cerciorarse que el poeta leonés no figuraba entre mis lecturas hasta entonces. Se titula "Edad (Poesía 1947-1986)" y está prologado por Miguel Casado. La dedicatoria de ayer reza así "A mi amigo Angel, ovetense como yo, con total afecto, Antonio Gamoneda 12-12-1986".

Alberto Escarpa fue el organizador de este acto, y leyó ante el poeta mayor (en el sentido de autoridad) unas palabras cargadas de intencionalidad poética -aunque el me negó mi apreciación de que había escrito un hermoso poema: "Es pura prosa, lo único que hay de poesía son las citas de Gamoneda"; a lo que yo le repliqué: "Tu lo verás así, pero Gamoneda acaba de recordar que "la poesía es el arte de la memoria", y que "poesía y vida son sinónimos", así que estoy seguro de que le has dedicado un poema". De Escarpa es esta idea: "Hemos aprendido de tí a tocar el hielo", al tiempo que introducía en su panegírico frases como "los múltiples rostros desde las habitaciones superiores" o "de ser algo en esta vida, somos aquello que permanece en los otros".

Ildefonso Rodríguez, que se confesó lector de Gamoneda desde hacía 30 años (ya vamos todos algo mayucos), glosó el empleo por el asturiano-leonés de palabras como "armario", "muerte" (presencia continua) y "luz", y expresó algo sobre la composición fractal de la poesía de Gamoneda que le quedó muy bien, pero no estoy seguro de haber entendido, así que no me arriesgo a interpretar aquí.

Antonio Gamoneda, antes de leer unos cuantos de sus poemas, estuvo iconoclasta respecto a la poesía: "No es exactamente literatura", dijo. Y lo justificó: "La literatura descansa y se origina mayoritariamente en la ficción, en tanto que la poesía es como una emanación de nuestra propia vida". Citó incluso a Aristóteles en refuerzo de esa idea: "La poesía pertenece a un género que carece de nombre".

En fin, mientras me firmaba el libro, y aprovechando de su simpatía y de que en la cola para firmar quedaban cuatro amigas, me perrmití ilustrar al nuevo Cervantes que hasta tenía un cuadro titulado como un verso suyo: "La mujer sacó sus manos del agua", y demostré, recitándole el poema en cuestión casi completo, que aquella admiradora que se había gestado en el silencio de las noches ajenas por los ochenta, había conseguido sembrar inquietudes de respeto y adhesión poética también en este meritorio de la rima libre.

 

2 comentarios

Administrador del blog -

No me influye quien tenga por qué libros de cabecera, querido Fernando. No se la relación que tiene el Presidente actual de España con la poesía, pero la mía con esta actividad creativa es de puro contubernio: duermo con ella casi desde que nací, en muchos momentos es la razón por la que subsisto, y generalmente es la forma que tengo de expresar el afecto por lo que quiero (las más) y el desamor por lo que me irrita (a veces)

Vagamundos -

Qué envida Ángel!!! ya me lo enseñarás.. auqneu bien sabes que es el autor de cabecera de ZP¡¡¡¡ Un abrazo