Al socaire: Gallardón lamenta haber creído que iba a disputar una campaña electoral
El alcalde de Madrid habría confesado a algunos íntimos, por lo que se comenta en algunos mentideros de Madrid, que podría haberse ahorrado las inversiones en infraestructuras que ha acometido en estos últimos años. La razón esgrimida es que desconocía, en el momento en que comprometió las ingentes obras que han puesto patas arriba la ciudad, que no tendría candidatos opositores a la alcaldía de Madrid.
Esta situación insólita, que se concreta a medida que se van acercando los comicios, pone notas peculiares, incluso cómicas, al evento electoral que deberia, teóricamente, dilucidar cuál de las distintas candidaturas presentadas por partidos y coaliciones sería merecedora de ser más votada por el censo.
Pero el candidato del PSOE, Miguel Sebastián, guarda con incólume celo sus propuestas para la ciudad, por lo que sus co-religionarios (es un decir) temen que cuando finalmente las dé a conocer, sea ya demasiado tarde para estas elecciones, aunque todavía podía ser pronto para las siguientes. Su comportamiento como "presunto" cabeza de lista, plantea incluso dudas entre los militantes, que creen que, a última hora, podría nominarse otro candidato, incluso menos conocido, para no comprometer la reelección del actual alcalde. Se trataría de una aplicación práctica de la técnica: "ya que no podemos vencerle, dejemos que él mismo se meta en los atolladeros".
No resulta muy diferente la situación por lo que se refiere a la coalición Izquierda Unida-Los Verdes, en la que se dilucida con asombrosa tranquilidad si sería mejor que el candidato o candidata fueran elegidos por las bases, por la cúpula o por insaculación simple. El procedimiento de designación digital ex autoritas es, sin embargo, el que goza de mayor predicamento, ya que viene siendo habitual entre los partidos de izquierda.
Gallardón, que se esperaba una competición más o menos normal, incluso con programas alternativos e ideas aprovechables, en la que pudiera ganar por amplia mayoría, parece estar siendo muy crítico, según las fuentes citadas, con estas dilaciones e incertidumbres. Ha reconocido -dicen- que, de haberlo sabido a tiempo, no se hubiera molestado en hacer la mayor parte de las obras que ha contratado, sino solamente las imprescindibles para esta legislatura que ahora termina, planificando el resto de manera completamente diferente, con la aconsejable calma, para ajustarse a los presupuestos y poder analizar bien las prioridades antes de tomar decisiones.
7 comentarios
creditos -
Un poco de memoria nunca viene mal para explicar el presente.
En abril de 1990, siendo diputado de la Asamblea de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, dirigió la investigación dentro del partido de las implicaciones del Caso Naseiro. Sobre este asunto sugirió la expulsión, entre otros, de Eduardo Zaplana.
Si sumamos la ambición desmedida de Gallardón a los resquemores de aquella actuación podremos entender mejor la actual estrategia del alcalde de Madrid.
Carlos Menéndez
http://www.creditomagazine.es
Administrador del blog -
El azar depara agradables sorpresas, aunque en mi caso, la sorpresa venga de la mano del azar que guió tu búsqueda en la red.
Muchas gracias por tu comentario elogioso hacia este Cuaderno y al interés de mis apuntes.
Tantas han sido las vivencias compartidas, Gonzalo, que el paso del tiempo y el que nos hayamos visto en los últimos años solo esporádicamente, jamás podrán hacer olvidar lo que nos tenemos en común. Te escribo también a tu correo particular y aquí te digo que, cuando te apetezca, sigas leyendo este Cuaderno y participando en él con tus comentarios, ayudando así a consolidarlo como una plataforma para comunicación entre gentes interesantes, que no habrán de perder nunca el imprescindible sentido del humor para sobrevivir al paso del tiempo y a los embates de la ignorancia, la estulticia y la envidia, con la misma gallardía con la que empezamos nuestra singladura.
Administrador del blog -
No sigo la COPE, y, desde luego, sería curioso que la campaña que está haciendo (según indicas) contra Gallardón tuviera el efecto de elevar el número de votantes de sus opositores. Si así fuera, estaríamos ante una modalidad de esquizofrenia mediática, que merecería un análisis específico. Dudas aparte, mi vaticinio es que el actual alcalde de Madrid ganará por goleada. A su candidatura le sucede algo parecido, en mi opinión (y salvando las diferentes escalas del tipo de ciudad), a lo que encuentro en Gabino de Lorenzo en Oviedo. Hacen obras, se dejan ver, hablan mucho. La gente no quiere alcaldes invisibles.
Gonzalo Fernández Cabal -
Debo confesar que ese azar al que atribuyo el hallazgo ha estado un poco dirigido, algunos amigos comunes me han hablado de Al Norte, he querido conocer más del restaurante y en él he encontrado tu blog. Pero a fin de cuentas, no está siempre el azar más o menos dirigido?
Me ha gustado encontrar tu verbo y tu opinión, la que a veces suscribiré y con la que en ocasiones discreparé, pero que siempre leeré con interés, porque la fina ironía y la agudeza con la que he podido constatar que la expresas, la hacen particularmente atractiva.
No he tenido tiempo aun para adentrarme en tus aportaciones literarias, lo haré con interés en cuanto la ocasión me lo permita.
Este escéptico de la red continuará deambulando por ella, sin abdicar de su condición y lo hará prestando especial atención a éste su descubrimiento interesante de hoy.
Incluyo este comentario en este lugar, evidentemente no tiene nada que ver con el tema en el que lo incorporo, pero no sabía otra forma de hacértelo llegar.
Un saludo afectuoso.
Manolo -
Es posible que esté en juego el probable y desconocido efecto de una campaña mediatica en una lucha electoral?.
No debemos olvidarnos de los efectos que en las ultimas eleciones generales de 2004 tuvieron los medios de un determinado signo.
Esta poniendo en juego la Cope su potencial capacidad de influencia en los resultados de una campaña?
Seria el exito de una nueva estrategia electoral a tener en cuenta cara a futuro y un paso adelente mas sobre el poder de los medios.
Administrador del blog -
Por supuesto, no me consta en absoluto que mi admirado Alberto Ruiz Gallardón haya dicho semejante frase, pero viendo el desorden de los partidos a su izquierda (al menos, teórica) para plantarle cara electoral, se me ocurrió que podía haberlo dicho. Porque lo que no le perdono, es que me haya puesto aún más imposible transitar por Madrid. Yo, que aunque nací en Oviedo (qué ciudad más bonita), me siento pueblerino, añoro una ciudad con menos tráfico, más aparcamientos, menos obras, más limpia, con menos ruido, y con las gentes mucho más relajadas. Dicen que Madrid era así. Por supuesto que el que haya cambiado no es culpa de Alberto Ruiz Gallardón, pero hay que volver a encontrar un Madrid amable. Mis obras preferidas hubieran servido para descongestionar Madrid, no para hacerlo más insufrible , y se hubieran concentrado en facilitar los enlaces con las ciudades cercanas y en más plazas de aparcamiento, disuasorias em su mayoría.
Keka -