Al pairo: La fusión de Arcelor y Mittal
Se trata de una noticia importante, sin duda, y que afectará de manera significativa al mercado siderúrgico español, y muy especialmente a las instalaciones que la antigua Ensidesa posee en Avilés y Veriña, muy centradas en productos de poca transformación, y que forman parte del mix de producción sustancial de estas fábricas.
Son muchas las reflexiones que surgen al hilo de los comentarios -de cuya incomprensible naturaleza errática alguien de la cúpula de Arcelor debería dar alguna explicación más allá de la simpleza de afirmar ahora que "es bueno para la empresa" lo que hasta unas horas antes del acuerdo había venido fundamentando una dura campaña mediática contra la "posición hostil" de Mittal.
Para quienes hemos tratado de vender, durante los años en que España aún no pertenecía a la Comunidad Europea, en el rígido mercado comunitario, los perfiles, la chapa gruesa y las vigas de ala ancha de Ensidesa, sometidas entonces a un desmesurado control de cuotas y precios, es inevitable sentir la nostalgia de aquella idea de empresa que hoy ha perdido su identidad, para regirse por otras coordenadas, determinadas muy lejos de los intereses nacionales y, por lo que se va conociendo, poco transparentes.
Estamos, sí, en un mundo global, en el que la facilidad de acceso a los mercados ha aumentado, y la competitividad tiene cada vez menos trabas. Pero las grandes fusiones empresariales, que, en el fondo, persiguen la reconstrucciónde monopolios que restrinjan la competencia, no hacen sino poner continuamente sobre el tapete la cuestión de lo que se pretende queriendo ser el más grande: reducir la aplicación de las reglas del mercado libre, controlar a su antojo las producciones y los precios, conseguir el máximo poder para obtener la capacidad de decisión total en la obtención del mayor beneficio posible. Lejos los tiempos de la autarquía, pero también la defensa del mantenimiento de los puestos de trabajo locales. La economía será global, sí; las necesidades de empleo y actividad económica tienen una componente local insoslayable.
En este contexto, parece ingenua la posición apurada de la Comisión Europea para proclamar que no se prevé que el mercado interior del acero en la Unión se vea afectado decisivamente. Somos todavía muchos los que pensamos que la producción de acero al carbono y de sus transformados es estratégica para el producto interior bruto español (y, obviamente, del asturiano). No nos gustaría conocer en poco tiempo que se anunciarán nuevas reducciones de empleo y actividad en la ya muy castigada economía regional.
3 comentarios
Luis -
Administrador del log -
Aunque, por otra parte, los diferentes tipos, calidades y dimensiones introducen variables en el precio, puede servir como orientación la información períodica de fuentes como MEPS (ver http://www.meps.co.uk).
Un simple vistazo a estos índices puede dar idea de los amplios márgenes que puede haber entre los aceros producidos en Asia o en los mercados occidentales.
Para corroborar este aserto, incluyo a continuación los precios medios ( a fecha marzo de 2006) en algunos mercados, para los productos genéricos más comunes (Precios en dólares por t).
a) Precios medios para productos planos:
Mundo (606)
UE (608)
N. AMERICA (698)
ASIA (510)
b) Precios medios para productos largos:
Mundo(506)
UE(523)
N. AMERICA(588)
ASIA (408)
En el mismo período, los precios por producto tipo reportados al mercado, fueron:
Chapa caliente (651)
Bobina fria (620)
Bobina galvanizada (710)Bobina electrocincada (702)Malla de alambre (462)Perfiles y vigas (612)Redondo corrugado (470)Barras comerciales (534)
Los accionistas de Arcelor y Mittal están de enhorabuena. Los consumidores occidentales, tal vez (si se incrementa la participación de la producción asiática). Los empleados de Arcelor, en mi opinión, deberían de estar algo más inquietos.
Luis -