Blogia
El blog de Angel Arias

A barlovento: Davos prevé un final económicamente saludable

A barlovento: Davos prevé un final económicamente saludable

El 24 de febrero, el Foro Económico Mundial comenzará una de sus sesiones plenarias en Davos, para seguir dándole vueltas a eso de la globalización y sus efectos, sobre todo, sociales y económicos. La localidad suiza se convierte así, por unos días, en centro intelectual de los estudiosos del comportamiento de la especie humana, desde una perspectiva, digamos, utilitaria para ella misma.

Buscando un titular para el evento, los organizadores han difundido que la situación general del planeta Tierra ha sido definida por los participantes como esquizofrénica, según los datos de una encuesta que pretende reflejar el espíritu actualizado de la convención. Un esfuerzo de acercamiento a todos, porque aunque el Foro de Davos ya ha dejado de ser visto como una reunión exclusiva de representantes de la riqueza, -y contrapunto a su hermano putativo, el Foro de Montelaegre, ahora también en Nairobi-, y aparece como más integrador de los países más y menos solventes, aún quedan muchas grietas. 

Por otra parte, v
arias prestigiosas instituciones han preparado un Informe para presentar y desbrozar los escenarios más pesimistas para 2007, o sea, el presente. No parece que lo hayan dudado al escoger los colores con que pintar el cuadro. De entre las múltiples opciones posibles para una catástrofe global inmediata, se han elegido tres, y, por lo que me suscita lo que he leído, los autores no se han ahorrado imaginación literaria propia de las crónicas negras.

El cambio climático, con inundaciones, desastres ambientales, hambruna y mayores desequilibrios económicos, está allí. El terrorismo, combinado con el ataque a varios petroleros, lo que hace subir el precio del crudo, también. La informática, ligada con una especie de gripe aviar perfeccionada, por la que se propaga, en puro efecto mariposa el mensaje de un brote que no es tan importante pero que acaba siendo terrible, asímismo.
 

Lo que me parece más relevante es que el optimismo económico con el que se acude a Davos resulta, por el contrario, prácticamente generalizado. Aquí es donde hay que encontrrar la esquizofrenia: los Gobiernos son más optimistas que los ciudadanos de los países que rigen. Los gobernantes de los países desarrollados, las multinacionales que financian el Foro, los profesores de mayor relieve universitario, la gente con indubitable matiz conservador que domina en Davos, están muy satisfechos del avance económico en el mundo global. Hay más comunicación e intercambio de información relevante, los mercados funcionan de forma más abierta, las posibilidades de poner en pie nuevos negocios con buenas ideas en tecnologías emergentes son más altas, etc. 

La mayor parte de los ciudadanos de esos mismos países piensan lo contrario. Dicho de otra manera, el mismo medio da para dos opiniones contrarias: los que dirigen ven motivos para felicitarse; los que son dirigidos, creen más bien que la evolución es a peor.

Es decir, que el mundo global ha servido para concentrar más la riqueza y el poder, y el pueblo llano tiene que contentarse con las migajas de creerse informado, pero con limitadas capacidades de actuación. La interpretación es mía, pero me da la impresión de que, si combinamos la reflexión económica con los escenarios pesimistas,  esta sociedad se puede extinguir en plena generación de mayor riqueza, pero sin haber aprendido a distribuirla mejor ni, ay, a ponerse de acuerdo sobre sus prioridades.

3 comentarios

Parado -

Pues los tres temas de originales nada, pero de reales mucho. Al fin y al cabo debaten sobre los miedos del hombre, sobre el miedo al futuro más cercano. Y curiosamente estos miedos los ha originado el progreso y la globalización.
El ciudadano como siempre en la base de la pirámide.

lynnsinhill -

Yo también he decidido votarte, dejo mi voto en ciencia y mediambiente.


hasta otra

lynnsinhill -

Hola, ante todo gracias por tu visita a mi blog y por tus cumplidos a mi texto: inteligencia y emotividad, dos características que forman un binomio increíble. Ojalá fuera así.

Bueno, he leído tu blog. Lo tuyo es auténtico periodismo ciudadano, me ha gustado.

muchas gracias

Lynnsinhill